Medicine Paranoid

Hace un par de días que no me ando sintiendo muy bien. Tengo un acidez de estómago que me está perforando y también algunos mareos que me dejan viendo pajaritos de colores... No sé qué será, tendré que ir al Doc...Pero desde ya que me agarraron todas las paranoias... todas...
La única que descarté sin pensarlo fue la de un embarazo, no porque no lo quiera, al contrario, no veo la hora de encontrar al padre de mis esperados 4 hijos (dos de ellos mellizos, por favor, no, no, que sean dos varones mejor...gracias) sino más bien porque no cabría esa posibilidad... Así es que no sé si para mejor o peor, pero peste que hubiera dando vueltas creí que podría tener...
Y en esos días es cuando maldije a Chiche Gelblum por todos esos programas pedorros que te rompen la cabeza con cuanta enfermedad nueva exista y los síntomas y las estadísticas de muerte (que no son ciertas, pero mi estado paranoico no lo asimilaba) y lo único que logré fue estar minuto a minuto cada vez más psicosomática...Un verdadero flash...
En otras épocas cuando me sentía así hasta hacía un testamento y además de firmarlo le ponía mi huella digital, para certificar que era mío (ah, no...yo una improvisada? Ni ahí!) y eso que tendría unos 10 años...Ahora lo recuerdo y no se si creer que necesito ayuda terapéutica o tengo demasiado sentido común...
Qué se yo, cosas que uno hace de niño...o tal vez es que no me gustaría que mis pertenencias se las quede cualquiera o las tiren a la bosta, sí, soy demasiado materialista, pero no en el sentido “guita, guita, guita” sino más bien con los objetos, les doy un opulento valor afectivo, porque me hacen recordar quienes estuvieron a mi lado y los momentos que compartí con gente linda...En fin, mejor me voy a sacar un turno con el galeno que si sigo así ni para testamento me van a alcanzar los pulsos.